
Hoy es un día triste para todos los seguidores de The Office. Tras siete temporadas al frente de la serie de NBC, Steve Carell se despidió dejando el mando de Dunder Mifflin a un nuevo jefe, eso sí, el listón está muy alto y no sólo el hábito hace al monje.
Hace más de un año que el protagonista de excepción de la hilarante comedia anunció durante una entrevista en la radio que la séptima temporada sería la última para su personaje, que tras ella abandonaría la serie. Y nada le ha hecho cambiar de parecer. En el capítulo de ayer, The Office 7x22 Goodbye Michael, Michael Scott, Steve Carell, se despide de la oficina donde hemos podido verle durante los últimos siete años, y si para nosotros será duro el adiós, ni que decir tiene para sus compañeros de trabajo. Hace poco contábamos que en la grabación del último capítulo de Steve en el set, muchos de sus compañeros no podían evitar romper a llorar ante la emoción de esas escenas finales con su compañero, con su amigo.
Antes de la emisión del capítulo E!Online publicó una interesante entrevista a uno de los responsables de The Office de la que rescatamos lo siguiente:
La emoción viene de cómo Michael lidia con este momento. Para él, este lugar ha sido siempre una familia, mucho más de lo que el resto de personajes de la serie ha podido sentir. Es un gran momento para él.
Su salida deja al resto de la serie en un buen lugar para continuar desarrollando los demás personajes y Michael se marcha de una manera satisfactoria.
Tanto Michael Scott como Steve Carell tienen la salida que merecen. Pero lo que me encanta es pensar que es la salida perfecta que Michael merece. Cada personaje tendrá un momento especial con Steve.
No podemos perder de vista que la vida en Dunder Mifflin continúa después del episodio de ayer, y es que la despedida de Michael no es la season finale, la vida sigue en la oficina. Tras este episodio a The Office le quedan 3 nuevos episodios para ajustarse a los cambios y demostrar que el programa continúa adelante aún con la pérdida de parte del alma de la comedia. El relevo para Michael ya se está perfilando y aunque Michael es inimitable, eso no quiere decir que The Office no pueda seguir creciendo de manera diferente.
El personaje continuará con su vida lejos de Scranton, con Holly, pero atrás deja momentos míticos para el recuerdo: sus meteduras de pata, sus surrealistas charlas en la sala de conferencias, sus fiestas sin sentido, sus pautas alocadas de comportamiento, sus manías... Más de 140 capítulos para el recuerdo, no habrá nunca un personaje como él.