
Final de House: último capítulo. Ocho años de casos médicos imposibles, de contestaciones abruptas, de sarcamos inteligentes, de inocentadas subidas de tono, de jugar con las mentes de todos los que le rodean, de egoísmos y arrogancia sin control. Ocho temporadas de House que acabaron el lunes con el episodio Everybody dies.

House es un hito televisivo que nos ha acompañado durante los ocho últimos años, y que se había convertido en todo un signo de identidad para Fox. Sin embargo, su series finale sólo logró congregar a poco más de ocho millones de espectadores, acorde con los números de los dos últimos años. La serie ha ido acusando cierto desgaste y llevaba tiempo alejada de los 20 e incluso los diez millones de espectadores por episodio. Lo cierto es que su debut en 2004 fue flojo, con siete millones de audiencia, pero acabó la primera temporada de manera meteórica, con 20 millones enganchados a la nueva serie de Fox, que se convertiría en todo un icono.
Llegábamos al final de la serie con Wilson enfermo de cáncer y sólo cinco meses de vida restantes que no iba a poder pasar con su mejor-único amigo, Gregory House, ya que la última de sus "bromas" le devolvía a la cárcel el tiempo suficiente como para no poder estar más con su amigo. ¿Qué haría House entonces?
El doctor intentó evadir la cárcel haciendo que los demás pagaran el pato de sus acciones y le libraran de la responsabilidad pero metió la pata con Foreman y Wilson no aceptó, incluso salvó a un paciente que moribundo, le propuso decir que él tenía la culpa... pero le salvó, no por moralidad, sino porque resolver el enigma de su enfermedad, volvió a ser más fuerte que ninguna otra cosa.

Todos esperábamos un funeral en el último episodio, y lo tuvimos, aunque no acabó cómo pensábamos.
El capítulo comenzó con House en una fábrica abandonada en llamas tirado al lado de un hombre muerto. Más tarde sabríamos a través de flashbacks que se trataba del paciente de la semana, con el que habría ido hasta allí para drogarse, y evadirse de un mundo que no podía controlar: su mejor amigo se moría y él tenía que volver a prisión en lugar de estar con él. Allí tirado en el almacén, House pensaba que no le quedaba nada más por lo que vivir y en su último acto egoísta moriría antes que Wilson. Entonces su subconsciente envió a diferentes personas de su pasado para que le guiaran: Kutner, Amber, Stacy y Cameron -con su chaleco- se le aparecieron para hacerle comprender diferentes cosas, como el deseo de suicidio que tenía, que era capaz de amar o que lo que estaba haciendo era de cobardes. Cuando por fin decidió salir, el edificio se vino a abajo y House murió.

O al menos eso es lo que les hizo creer -en plan Sherlock Holmes- a todos, que se reunieron para despedir al doctor en un emotivo funeral al que asistieron su madre, sus compañeros y excompañeros del hospital (incluidas Cameron, Trece y Masters) así como Stacy y Dominika, lo que redondeó la reunión de la finale. Además, se hizo mención a Cuddy, que a falta de la actriz, se agradece al menos la mención.

Lo cierto es que escapó por la puerta de atrás para simular su muerte y así poder pasar los siguientes meses con Wilson: ha perdido su vida, quizá no pueda volver a ejercer la medicina, pero su amigo lo necesitaba, ya lidiará con la ley cuando Wilson no esté.
I’m dead, Wilson, How do you want to spend your last five months?
El episodio acabó con los grandes amigos subidos a un par de motos y poniendo rumbo a ninguna parte hasta que el cuerpo de Wilson aguante: libres. Una forma amable de despedirse.
Muchos esperaban que el final de House fuera la muerte del protagonista. David Shore ha reconocido que la opción estuvo sobre la mesa pero que finalmente les parecía mejor dejar el futuro abierto, que la gente se quedara con la idea amigable de Wilson y Greg de viaje por ahí, haciendo dios sabe qué.
Como curiosidades, el paciente de turno no tuvo lupus (vamos, todos esperábamos un lupus para el final); Chase tomó el puesto de House en el Princeton-Plainsboro; Foreman descubrió que House seguía con vida (confirmado por David Shore); y vimos que Cameron tenía pareja y un bebé.
Es duro despedirse de una serie con tantos años a sus espaldas y aunque en sus últimas temporadas palideció en historias, lo cierto es que siempre ha logrado sorprendernos y nos da pena que ya no vayamos a tener nuevas batallitas de Gregory House. ¿Qué te pareció el último capítulo de House?
