Las puertas del infierno se han abierto en Lockhart & Gardner. La quinta temporada de The Good Wife está poniendo patas arriba las bases de la serie en un intento por salir de esa zona acomodada que le da audiencia pero malas demos, y lo estamos disfrutando.
El Apocalipsis llegó este domingo a una de nuestras series favoritas: los planes de Alicia Florrick por emanciparse de Lockhart & Gardner de manera discreta y silenciosa, no han salido nada bien. Tras cuatro episodios preparando en la sombra la firma “Florrick, Argos & Associates”, el episodio 5x05 Hitting the Fan de The Good Wife, puso el punto y final (o aparte) en la historia de Alicia Florrick y la firma de Will Gardner, con un capítulo que fue récord de audiencia de la temporada, con 9.35 millones de espectadores.

La traición y la decepción que siente Will Gardner teñirán los próximos episodios, y tanto él como Diane irán a degüello contra la nueva firma que han formado sus socios de cuarto año y Alicia Florrick, robando sus clientes más importantes (Google Chunhum). Los próximos episodios van a representar interesantes enfrentamientos entre los viejos colegas, en los que no planean tomar rehenes.
¿Qué necesidad tenía Alicia de hacer las cosas así? Alicia Florrick es un personaje que nunca hemos acabado de comprender. Le puede el peso de la responsabilidad familiar y aunque es un ciclón en su vertiente profesional (inteligente, intuitiva, empática) y como madre (luchadora, trabajadora), su lado de buena esposa choca y la convierte en una abnegada soñadora, que no es capaz de anteponerse a sí misma a los demás. Durante la temporada 3 de The Good Wife pudimos ver cómo se soltaba la melena, pero Alicia ha vuelto a enterrar esa parte de su personalidad, ha decidido seguir con el esposo que la engañó con prostitutas (y no prostitutas). Es esta necesidad de mantenerse al lado de su marido el gobernador, con quien cree haber retomado su relación (¿hasta el próximo engaño? ¿Está reformado Peter?) la que impulsa a Alicia a huir de Lockhart & Gardner… No por montar su propia firma, sino por huir de la tentación que día a día la esperaba en el despacho de al lado.
Así, de un día de risas en el que dos compañeros recordaban su desliz en el cuarto de baño de la oficina, pasamos a un día lleno de odio y resentimiento, que... ¿no podría acabar en una bonita reconciliación sexual? Estaría bien: Alicia pasando las noches con Will y los días enfrentándose a él en los juzgados. Del amor al odio, un paso... ¿Y viceversa?

¿No se han puesto muy interesantes las cosas en The Good Wife? ¿Atraerá nueva audiencia tantos cambios?