
Nos encontramos a una semana del último capítulo de Breaking Bad temporada 4, pero el episodio del pasado domingo, "End Time", supo a auténtica finale excepto por un detallito de nada, ese final que nos puso de los nervios.
Del capítulo del pasado domingo, lo primero que queremos decir es: Bryan Cranston premio Emmy. Su interpretación del profesor Walter White ha llegado en esta cuarta temporada de Breaking Bad a rozar lo sublime entre la rabia, la indignación, la humillación, el miedo... y el actor que daba vida al padre de Malcom (Malcom in the Middle), tiene registros para eso y mucho más, y nos permite meternos en la piel de su personaje semana tras semana. Y ahora que se acerca el final aguardamos la gran sorpresa.
Siempre se ha esperado que Pinkman y White acaben llevándose bien. Walter lo ha tratado a veces como a un hijo y se han tenido el uno al otro en multitud de ocasiones, cuando sólo podían contar el uno con el otro... Y después de episodios llenos de odio entre ambos (pelea encarnizada a puñetazo limpio incluida), ambos han vuelto a sentirse unidos por la misma amenaza. De la misma manera que Walter atropelló a dos matones para que Pinkman no los matara, y éste disparó contra el nuevo cocinero de meta que Gus entrenaba para relevarlos, ahora ha llegado el momento en el que se defiendan derrocando al jefe. Como en los viejos tiempos con Tuco. Poco a poco ellos solos van a acabar con el contrabando a gran escala.

Pero Gus no es el simplón de Tuco, y no cae en trampas simples. El montaje del envenenamiento de Brock, seguro que le cuesta caro a Gus, pero nos va a costar verle caer. Cuando parecía que el domingo acabaría la pesadilla con el coche bomba, un sexto sentido del mafioso propietario de Los Pollos Hermanos, le hizo retroceder: ¿acaso vio algo en la cara de Pinkman que no le gustó? ¿Acaso se arrepintió del envenenamiento de Brock y quiere hacerle saber a los médicos que se trata de ricina? Este hombre tiene ojos en todas partes, no nos sorprende que supiera lo de la ricina en el paquete de tabaco, pero nos sorprendería enterarnos de que tiene corazón. Así que votamos porque cree que algo sucede.
Con Hank acercándose a la verdad, Skyler a punto de explotar y Walter desesperado porque Gus es un tremendo estratega que parece imposible de derrotar, quizá sería justicia divina que Mike, volviese a escena y acabara con su tirano jefe.
La próxima semana, con "Face Off", la serie encara su recta final. No sólo la temporada 4 de Breaking Bad, sino la serie en total. La temporada 5 será la última temporada de Breaking Bad y, ¿no deseamos que algo empiece a salirles bien a estos dos? Han conseguido que empaticemos con dos cocineros de metanfetamina que han pasado por todos los puestos de la cadena, que han matado para sobrevivir... Si Showtime nos ha hecho empatizar con Dexter y su pequeño gran pasajero oscuro, por qué iba a ser diferente AMC con estos dos... "Face off" despedirá una temporada que al principio parecía vacía, que ha tenido sus más y sus menos (todo el asunto de Skyler por medio, aburría a las moscas), pero que ha encarrilado una recta final que se presume memorable.